Ponerse en ebullición!

Cuándo hacerlo: Cada día, cuando te sientas bien
Duración: 15 minutos
Utensilios: Reloj despertador


Primer paso: En ebullición hasta la locura!
Enciérrate en tu habitación y ajusta la alarma para que suene pasados 15 minutos. Enójate, acalórate como si fueras a subir a los 100 grados. Llévalo al clímax pero no te desahogues. Continúa forzándolo, ponte loco de la furia, pero no te desahogues. Que no haya expresión, ni siquiera una almohada para golpear. Reprímete tanto como puedas, jústamente al contrario de la catarsis.

Si sientes que surge tensión en el estómago como si algo fuera a explotar, encoge el estómago, procura que se ponga tan tenso como puedas. Si sientes que los hombros se ponen tensos, haz que se pongan más tensos aún. Deja que todo el cuerpo esté tan tenso como sea posible, casi como si estuvieras sobre un volcán, bullendo interiomente pero sin desahogarte. Este punto debe recordarse: no desahogar. No grites, porque entonces el estómago se relajará. No golpees nada porque entonces los hombros se liberarán de la tensión.

Segundo paso: Ahora observa, simplemente...
Cuando cese la alarma, siéntate en silencio, cierra los ojos y simplemente observa lo que está sucediendo. Relaja el cuerpo. Este calentamiento del sistema forzará una disolución de tus pautas de conducta…

Osho: Tomado de: Be Realistic: Plan For a Miracle, capítulo 17