Meditación respirando en los chakras

Respirando en los Chakras puede ayudarte a tomar conciencia y experimentar cada uno de los siete chakras. Esta técnica es activa y consiste en una respiración rápida con movimientos corporales, acompañado por sonidos musicales, para abrir, traer conciencia y vitalidad a los chakras.

Este método debe hacerse con el estómago vacío en la mañana temprano o al atardecer.

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Primera etapa: 45 minutos de respiración en los chakras

De pie con los pies separados la medida de las caderas o los hombros. Permite a tu cuerpo soltarse y relajarse. Cierra los ojos, y con la boca abierta, respira rápida y profundamente en el primer chakra. Al respirar, permite que tu atención esté el área pélvica de tu cuerpo, donde está el primer chakra. Pon igual énfasis tanto en las inhalaciones como en las exhalaciones. No fuerces tu respiración respira en un ritmo cómodo y que te permita estar consciente de los sentimientos y sensaciones de cada chakra.

Continúa hasta que escuchas una campana. Esto indica que comiences a respirar en el segundo chakra. Cada vez que escuchas la campana, sube tu respiración rápida, profunda hasta el siguiente chakra. Al ir subiendo tu respiración de chakra en chakra, deberá volverse más rápida y más suave, esto significa que estás tomando casi el doble de respiraciones en el séptimo que en el primero.

Al respirar, ayuda sacudir el cuerpo, estirar, rotar o balancear tu pelvis, y mover tus manos de cualquier manera que sientas, pero permite que tus pies permanezcan en un lugar. Permite que tus pies, rodillas, caderas, y otras articulaciones sean como resortes, para que una vez que pones a andar la respiración y el cuerpo en movimiento, esto se vuelva continuo y sin esfuerzo. Permite que tu conciencia permanezca principalmente en las sensaciones de los chakras, más que en la respiración y el movimiento del cuerpo.

Después de respirar en el séptimo chakra, oirás tres campanazos. Ésta es la señal para que permitas que tu respiración y tu conciencia se den vuelta y desciendan por cada chakra.

Al respirar bajando de chakra en chakra, permite que tu respiración se vuelva más y más lenta. Permite que la energía descienda fluyendo por si misma desde el séptimo chakra para incluir el espectro completo de energía de los chakras desde arriba hasta abajo, como siete colores formando un arco iris. Esta respiración descendiente deberá tomar cerca de dos minutos. Será tu criterio cuanto rato permaneces en cada chakra.

Después de terminar esta secuencia, párate en silencio unos momentos antes de comenzar la próxima secuencia. Ésta secuencia de respiración ascendente y descendente deberá repetirse tres veces, o por un total de cuarenta y cinco minutos. Si al comienzo no sientes la energía de los chakras, sólo respira en el área donde están localizados. Recuerda no forzar la respiración, mas bien permite que la respiración y los movimientos del cuerpo sean como un puente que te conducen a las sensaciones y cualidades de cada chakra. Sensibilizarse a las diferentes cualidades de cada chakra se logra no con fuerza, sino a través de paciencia y conciencia.


Segunda etapa: 15 minutos de silencio.

Después de la tercera secuencia de respiración, siéntate relajado con los ojos cerrados en silencio. No focalices en nada en particular. Permanece un testigo de lo que esta sucediendo, sin juicio